Ampollas anticaída IMD, tu aliado contra la caída del cabello

Si crees que pierdes cabello y no sabes por qué, ahora es un buen momento para parar un segundo y tratar de averiguar las causas. No hablamos de alopecias diagnosticadas ni de enfermedades no relacionadas con el cabello directamente pero que provocan su caída; ahí no hay ningún misterio, como sabrás. Hablamos de despertar un día y ver que hay demasiado pelo en la almohada −y es el tercer día que te fijas− o que tu cepillo se lleva más pelo del que debería. Son estos casos de los que hablamos.

Hay ocasiones en las que perdemos pelo y no sabemos por qué. Ni siquiera lo sospechamos. ¿Será el otoño? ¿el estrés? ¿la vuelta a la rutina? ¿las hormonas? ¿la alimentación? ¿algo relacionado con tener un cabello demasiado grasiento? La respuesta la tiene tu dermatólogo −consúltale−, pero es habitual que en estas fechas, cuando el otoño nos trae los primeros días nubosos y fríos, aumente el número de cabellos caídos. Pasa todos los años. Las causas son múltiples, aunque hay dos sospechosas habituales que además valen para un gran número de personas: mantener una dieta pobre en vitaminas y minerales, y conservar los hábitos que durante el verano tuvimos para mantener el pelo hidratado, como tener siempre a mano las mascarillas o usar habitualmente los acondicionadores.

Dieta deficiente y sobrehidratación, compinches silenciosos de la caída del cabello

Tanto la dieta deficiente como la sobrehidratación del cabello no conducen directamente a la caída del pelo, pero sí empeoran la situación si hay causas más graves. Por eso es fundamental contar con alguna ayuda extra para que podamos hacer que nuestros folículos pilosos funcionen como es debido, y aquí entra tanto alimentarlos convenientemente con nutrientes que estimulen la producción de cabello como eliminar los excesos de grasa que puedan dificultar el desarrollo del folículo piloso. Y ambos objetivos tienen una sola protagonista: una ampolla anticaída IMD.
Las ampollas para la anticaída capilar de IMD son un tratamiento preventivo cuyo objetivo es potenciar la producción de un cabello más sólido y resistente. Para ello cada ampolla suministra varios minerales que son el combustible que necesitan nuestros folículos pilosos para hacer crecer un cabello resistente. Entre estos minerales aparecen el magnesio, el potasio, el aluminio, el cobre, el sodio o el manganeso.
Además de los minerales, las ampollas anticaída de IMD aportan otros ingredientes que reducen la cantidad de sebo y de caspa en el cuero cabelludo, lo que contribuye no sólo a eliminar posibles riesgos relacionados con la sobreproducción de grasa, sino que mejora notablemente el aspecto del cabello, añadiendo brillo y eliminando ese aspecto de suciedad pegajosa que tiene el pelo cuando se almacena demasiada grasa.

Modo de empleo de las ampollas anticaída IMD

El modo de empleo del tratamiento consiste en la aplicación de una ampolla dos veces por semana; el calendario óptimo de aplicación te lo dirá tu dermatólogo, pero no más de dos ampollas cada siete días es lo habitual. Como tratamiento tópico, habrá que masajear el cabello, ligeramente húmedo, con el contenido de la ampolla y dejar actuar en torno a 6-8 horas.
El mejor momento para aplicar el tratamiento es justo antes de salir de casa, pues la ampolla hará efecto sin que nos demos cuenta. Otra opción es aplicarlo durante la noche, o al volver del trabajo, pero no es lo más recomendable, dado que, al acostarnos, la solución líquida de la ampolla podría ser absorbida por la almohada, perdiendo así efectividad. Lo ideal es que, durante el tiempo que dure la ampolla en el cabello, la cabeza esté en posición vertical, con el cuerpo erguido.