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¿Me estoy quedando calvo?

La pregunta de si me estoy quedando calvo suele asociarse a una preocupación excesiva por la caída del pelo. Sin embargo, no todos los síntomas que te parece auguran lo peor suponen que realmente el daño capilar sea permanente. Y en caso de serlo, siempre existen soluciones estéticas, o injertos capilares que conseguirán que recuperes toda la autoestima y dejes de preocuparte. Ahora bien, no adelantemos acontecimientos. Vayamos por partes.

Cosas que afectan a tu cabello y que no implican que te estés quedando calvo

No cualquier caída de cabello implica que haya alopecia o calvicie. Es decir, en muchas ocasiones, la preocupación de “me estoy quedando calvo” es más una cuestión temporal o desencadenada por un factor psicológico como el estrés, que una alopecia física e irreversible. Es más, no son pocos los estudios que investigan cómo influyen esos factores psicológicos en la caída capilar y cómo afectan a las alopecias genéticas. Sin embargo, para salir de dudas, siempre es mejor acudir a un experto en salud capilar que pueda hacer un diagnóstico adecuado y precoz.

5 señales de alerta para consultar a un especialista y poner remedio al “Me estoy quedando calvo”

Si bien en algunas ocasiones la preocupación asociada a las búsquedas sobre “me estoy quedando calvo” se corresponde más bien con factores puntuales como puede ser el estrés, o ambientales como lo es la caída de cabello por el cambio de estación, en otros, el factor genético o una dolencia que provoca la alopecia están mostrando sus síntomas. Y son precisamente esos síntomas los que preocupan al paciente que debe acudir lo antes posible a un dermatólogo especializado en salud capilar.

Cambios en el pelo que se vuelve más fino y débil sin razón aparente

Este es el síntoma más inicial de una alopecia, pero está también asociado a factores ambientales y a otras dolencias que nada tienen que ver con quedarse calvo. Para distinguirlos, debes acudir a un tricólogo.

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Indicios asociados a alopecias androgenética como caspa o exceso de sebo que antes no se tenía

Hay algunas pistas en los primeros estadios de alopecias androgenéticas que pueden despistar por tratarse también de estados habituales del cabello sano. Un exceso de caspa, de sebo, o rojez en la zona del cuero cabelludo es una señal para acudir al dermatólogo. Puede que no te ocurra nada, pero seguro que te ayudará a encontrar los productos más adecuados para tratar esa dolencia puntual, o diagnosticará precozmente tu problema para evitar esa preocupación frecuente de “me estoy quedando calvo”

Exceso de cabello en la almohada o en el baño

Es otro de esos síntomas confusos. Aunque puede servir para anticiparse a una alopecia, puede confundirse fácilmente con algo tan frecuente como la caída capilar propia del cambio de estación. ¿Cómo diferenciarlos? Tan fácil como pedir una cita con un dermatólogo especializado.

Pérdida de pelo en la zona frontal de la cabeza

Este síntoma sí tiene altas probabilidades de estar indicando un problema de alopecia. De hecho, si notas que tu cabello ha dejado de crecer en la zona frontal de la cabeza, es probable que esa preocupación sobre si te estás quedando calvo sea algo real. En IMD nuestros expertos en dermatología capilar te ofrecen la primera cita gratuita para salir de dudas. 

Aparición de calvas en la coronilla

Aunque puede haber otros motivos, la alopecia androgénetica se manifiesta con calvas en la coronilla. De hecho, en esta fase, la problemática ya ha avanzado. Encontrar el mejor tratamiento para frenar la caída del pelo supone atajarlo cuanto antes. ¿Por qué no pides tu primera consulta gratuita en IMD ahora?
Tengas o no un problema de alopecia, si has llegado hasta aquí buscando respuesta a tus dudas de “me estoy quedando calvo”, queremos ponernos a tu completa disposición.

Todo el equipo médico de IMD ofrece sus conocimientos y experiencia para tratar cualquier preocupación que afecte a tu cabello.

Liquen plano en el cuero cabelludo

En el cuero cabelludo se dan una serie de dolencias y enfermedades que son para el público general desconocidos. Además, se pueden presentar de diferentes modos, y resulta fácil que un ojo no experto confunda síntomas. Uno de los ejemplos más claros es lo que se conoce como linquen plano en el cuero cabelludo, que es precisamente el tema que tratamos en nuestro post de hoy. 

La inflamación de la zona del cuero cabelludo con pequeñas ampollas y pelos infectados puede ser un síntoma del liquen plano en el cuero cabelludo en su versión clásica, que es también la más habitual. ¿Nunca has escuchado hablar de esta dolencia? Te presentamos la información sin mitos, elaborada por especialistas en dermatología capilar.

¿Qué es el Liquen plano en el cuero cabelludo?

Pese a su nombre, un tanto rebuscado, el liquen plano en el cuero cabelludo es una dolencia no infecciosa, que habitualmente provoca una hinchazón e irritación en diferentes zonas del cuero cabelludo. A menudo se presenta como unas pequeñas ampollas, que suelen causar picor y en algunos casos descamación.

¿Por qué aparece el liquen plano en el cuero cabelludo?

Entender cómo funciona esta enfermedad es clave para analizar el mejor tratamiento para cada paciente. Cabe señalar que el liquen plano en el cuero cabelludo puede presentarse en hasta tres variantes que mostraremos en el siguiente enunciado, y que además puede ser confundido con otro tipo de dolencias. Por eso, desde IMD te recomendamos pedir una cita en una de nuestras clínicas para obtener un diagnóstico personalizado que te ayude a tratar el problema.

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Algunas de las causas que desencadenan esta dolencia, aunque no las únicas puesto que la misma sigue siendo objeto de estudio por parte de dermatólogos especializados en salud capilar son:

  • Haber sufrido una infección de hepatitis C.
  • La toma de analgésicos como el ibuprofeno en algunas personas.
  • La utilización de algunos medicamentos para la hipertensión o para enfermedades cardíacas. 
  • Algunos metales, productos químicos y pigmentos.

Cabe señalar que el liquen plano no solo afecta al cuero cabelludo, dado que puede aparecer en la piel o en las uñas. Sin embargo, en nuestra consulta, nos centramos en el tratamiento del problema a nivel capilar porque además de ser molesto, puede causar caída del pelo.

Tipos de liquen plano capilar

El liquen plano capilar puede presentarse de tres maneras diferentes: clásica, alopecia frontal fibrosante y como Síndrome de Graham Little-Piccardi-Lassueur.

  • Clásica. Resulta el más habitual y se presenta en forma de ampollas muy pequeñas y rojas. Causa picor, descamación y en ocasiones dolor en la zona afectada. Además, produce en muchos casos caída capilar.
  • Alopecia frontal fibrosante. En esta variante, la enfermedad se presenta con una frente mucho más pronunciada, al afectar a la zona frontal. Si bien era mucho más habitual en mujeres, aparecen cada vez más casos en hombres. Las causas todavía están en estudio, si bien algunos especialistas lo relacionan con un mecanismo autoinmune.
  • Síndrome de Graham Little-Piccardi-Lassueur. En este caso, la aparición de alopecia cicatrizal es su signo más característico. Es la variante más compleja, puesto que destruye los folículos pilosos y es irreversible. Sus causas son primarias y secundarias, siendo las primeras genéticas, y las segundas relacionadas con infecciones, heridas o traumatismos.

Tratamiento y consulta con un especialista para el liquen plano en el cuero cabelludo

La mejor manera de determinar si en tu caso estás sufriendo una de las variantes del liquen plano del cuero cabelludo es acudir a una cita con un dermatólogo especializado. Como comentamos previamente, puede confundirse con otras dolencias, y al existir además diferentes manifestaciones, es fundamental poder valorar cada caso concreto para ofrecer el mejor tratamiento para el mismo.
Existen diferentes soluciones para esta dolencia, las cuales pueden basarse en la administración de medicamentos y en ungüentos tópicos. Los corticoides, antibióticos o antihistamínicos pueden ser algunas de las soluciones, pero dependen en gran medida del estado del paciente y de cómo haya afectado la enfermedad. También hay terapias con luz ultravioleta que pueden dar buenos resultados.